En el mundo laboral actual, caracterizado por horarios extensos y tareas repetitivas, las molestias físicas derivadas de largos periodos de trabajo son una realidad común.
¿Qué es una enfermedad laboral?
Una enfermedad laboral se refiere a aquellas patologías adquiridas como consecuencia del desempeño de labores durante el trabajo. Entre las más comunes se encuentran aquellas relacionadas con el sistema musculoesquelético, las cuales surgen debido a una sobresaturación de actividad que excede la capacidad de resistencia de nuestro cuerpo.
Una característica distintiva de las enfermedades laborales es su evolución gradual y progresiva, desarrollándose sin mostrar síntomas evidentes en las etapas iniciales. Sin embargo, estas enfermedades pueden manifestarse de manera súbita y evolucionar rápidamente una vez que se manifiestan.
Ejemplos de enfermedades laborales
- Dolor Lumbar: Causado por la permanencia prolongada en una posición sentada y la falta de apoyo lumbar adecuado en las sillas de oficina.
- Tensión en el Cuello y Hombros: Originada por posturas incorrectas al trabajar en una computadora o inclinarse sobre un escritorio durante períodos extendidos.
- Síndrome del Túnel Carpiano: Relacionado con movimientos repetitivos, como escribir o usar el ratón, que pueden causar compresión en el nervio mediano.
- Fatiga Visual y Problemas Oculares: Resultantes de la exposición prolongada a pantallas de computadora, contribuyendo a la fatiga ocular, sequedad y otros problemas visuales.
- Dolor de Cabeza y Migrañas: Asociados con el estrés y la tensión acumulada debido a largas jornadas laborales, especialmente frente a pantallas luminosas.
- Síndrome de Piernas Inquietas: Caracterizado por la necesidad de mover las piernas, puede intensificarse durante períodos prolongados de inactividad, como sentarse durante horas.
- Problemas de Circulación: La falta de movimiento puede contribuir a la mala circulación, manifestándose en piernas hinchadas y sensación de entumecimiento.
- Dolor en las Articulaciones: Especialmente en las muñecas, rodillas y codos, causado por posiciones estáticas y movimientos repetitivos.
- Problemas Gastrointestinales: La falta de movimiento y la mala postura pueden afectar la digestión y contribuir a problemas gastrointestinales como el estreñimiento.
La fisioterapia se presenta como la mejor estrategia para abordar la gran mayoría de las enfermedades laborales. A través de un tratamiento llevado a cabo por un fisioterapeuta profesional, se puede lograr la reducción del dolor y la restauración de la movilidad en la zona afectada. Además, el fisioterapeuta proporcionará pautas y consejos para mantener una adecuada higiene corporal en el entorno laboral, minimizando así las posibilidades de que estas enfermedades vuelvan a manifestarse en el futuro.
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