Uno de los principales problemas de salud que sufren las personas que trabajan mucho con sus manos es el Síndrome del Túnel Carpiano. Si eres carpintero, mecánico, músico, cajera de supermercado o escribes mucho en el ordenador, debes saber que tienes un alto riesgo de padecerlo.
¿Qué es el Síndrome del Túnel Carpiano?
El túnel carpiano se sitúa en la zona de la muñeca, en su cara anterior. Como su propio nombre indica, es un estrecho túnel formado por ligamentos y huesos. Por dentro de este túnel, pasa el nervio medio que se encarga de llevar los impulsos desde nuestro cerebro a la mano. También nos encontramos con los tendones que nos permiten moverla, dando fuerza, sobre todo, a los 4 primeros dedos. El problema viene cuando los tendones se tensionan y llegan a inflamarse. El espacio dentro del túnel se reduce y el nervio se comprime apareciendo las molestias y los dolores. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el origen está en un bloqueo articular en la sexta o séptima cervical.
Síntomas del Síndrome del Túnel Carpiano
Los síntomas más comunes son la falta de fuerza y entumecimiento. También son comunes el hinchazón de los dedos o el hormigueo en los tres primeros dedos. A veces, personas que acuden a nuestro centro de osteopatía y fisioterapia, nos comentan que son incapaces de coger una simple taza de café.
Para saber si se tiene esta enfermedad es conveniente realizar el Test de Phalen. Consiste en doblar la muñeca hacia abajo lo más que se pueda y mantenerla en esta posición entre 15 segundos y 3 minutos. En el caso de tenerla experimentará una sensación de agujas o de dolor.
¿Cuáles son las causas más comunes?
Por la amplia experiencia que tenemos en nuestra clínica de Gijón , podemos decir que viene originado por realizar movimientos repetitivos con las manos, golpes de muñeca, padecer artritis reumatoide o simplemente por cambios metabólicos y hormonales.
¿Cómo puede la osteopatía ayudar a solucionar el problema?
Básicamente de forma natural, a través de un tratamiento adecuado. Dejaremos el paso de los tendones flexores lo más libre posible, descongestionando la zona. Para ello actuaremos sobre músculos, ligamentos y tendones.
Por otro lado, buscaremos dar movilidad a los huesos de la muñeca que puedan verse afectados. También revisaremos tanto la región cervical (6ª y 7ª cervical) como la dorsal.
Una vez realizado el tratamiento, nosotros siempre aconsejamos a nuestros pacientes la realización de estiramientos mantenidos. Como por ejemplo, de 30 segundos a 1 minuto, en la zona del antebrazo.
Recordar siempre nuestro lema: tratamos las causas no sólo los síntomas.