Para finalizar este mes que hemos dedicado al deporte, hoy nos toca a hablar del más antiguo de la historia, el running, footing o, simplemente, correr. Ésta es,sin duda, una actividad que cuenta cada día con más adeptos. En las próximas líneas conoceremos los beneficios de este deporte, además de las lesiones más comunes, su prevención y tratamiento mediante la fisioterapia.
Hoy en día, el correr se asocia a la buena salud. Una persona que corre es una persona sana, que se siente bien, al contrario de la que no lo hace. Por si fuera poco, esta actividad nos ayuda también a conocernos a nosotros mismos y guarda estrecha relación con la alegría, el equilibrio y el bienestar. Tanto al principiante como al experimentado le cuesta ir correr, sin embargo, nos sentimos peor sino lo hacemos.
Como en toda actividad deportiva, la práctica de la misma repercute en varias partes de nuestro cuerpo, alguna de las cuales van a sufrir más que el resto. Por eso debemos de tenerlas en cuenta a la hora de evitar que aparezcan las temibles lesiones.
Contrariamente a lo que muchos creen, en el running no sólo se utilizan los músculos de las piernas, generalmente isquiotibiales, gemelos, cuadriceps y sóleo, sino que además afecta a los de brazos, abdomen o glúteos, entre otros. Al correr, realizamos un movimiento de vaivén con los brazos para darnos impulso. A mayor velocidad, mayor impulso. Las musculatura de nuestros hombros sufre en cada carrera. También el abdomen, porque de él depende el equilibrio de la musculatura de la zona lumbar, el glúteo y los abductores.
¿Qué podemos hacer para prevenir la aparición de lesiones?
Antes de empezar a correr debemos realizar siempre, un buen calentamiento. Es muy importante una buena entrada en calor. Las pulsaciones suben, la temperatura corporal aumenta y se consigue mejorar el transporte y absorción de Oxígeno. Un principiante siempre tiene que empezar caminando suavemente o trotando, nunca ponerse a correr directamente.
Otro aspecto importante, obligatorio antes de cada carrera si no queremos lesionarnos, es fortalecer y estirar las masas musculares comprometidas en la misma. Realizar correctamente los estiramientos nos sirve para poner nuestros músculos a tono y evitar sobrecargas.
Las personas que se dedican a correr de forma profesional, o que lo hacen de forma frecuente, conviene que antes de cada carrera se pongan en manos de un buen osteópata o fisioterapeuta, que va a trabajar para mantener una correcta alineación postural, y evitar así, cambios de posición del resto del cuerpo, que se va a adaptar a nuestra pisada. Con ello podemos eludir la aparición de problemas en rodillas y caderas.
Tener una buena pisada es también un aspecto básico. Conseguir la alineación de las estructuras óseas, ligamentosas y tendinosas a través de un estudio biomecánico de la pisada, realizado por un profesional experto en podología, es un requisito casi imprescindible para practicar este deporte profesionalmente.
La utilización de masajes, tanto antes, con el uso de cremas de calor para mejorar la circulación, como después de la carrera, con una crema de frío para aliviar la sobrecarga de los músculos, deberían estar a la orden del dia.
En resumen, si no queremos lesionarnos, es primordial que el fortalecimiento de nuestros músculos sea igual a su flexibilidad.
¿Cuáles son las lesiones más comunes que podemos encontrarnos a la hora de practicar el running?
Básicamente, nos encontramos con sobrecargas y dolores musculares producidos por correr largas distancias, roturas o desgarros musculares, tendinitis de Aquiles, periostitis, fascitis plantar y, como ya hemos comentado, diversas lesiones en la zona del hombro debido al braceo.
En nuestro centro de fisioterapia y osteopatía en Gijón, tratamos estas lesiones a partir de la detención del origen del dolor mediante diversos análisis, ya que muchas veces éste no se encuentra donde a uno le duele.
Una vez establecido el origen, mediante diversos masajes buscamos aliviar los dolores, aumentar la flexibilidad y la circulación, eliminando las toxinas del cuerpo. Al final, mediante diferentes técnicas, conseguiremos tener una buena alineación postural que es la que va a evitar lesionarnos con facilidad.
En nuestra clínica recomendamos, además, seguir una serie de consejos a la hora de practicar este tipo de deportes que nos ayudan a evitar que nuestro cuerpo se lesione. En primer lugar, llevar una alimentación sana y equilibrada. Durante la carrera, ingerir líquidos en pequeños sorbos para evitar la deshidratación, llevar prendas que transpiren poco, una vestimenta liviana y un calzado adecuado a nuestro pie. Es importante evitar al principio, correr sobre superficies muy duras porque la vibración será mayor, o en arena porque se sobrecargan más los músculos. Debemos dejarlo para corredores más experimentados.
Hemos hecho un repaso a las lesiones más comunes que se producen a la hora de practicar running y os hemos enseñado qué debemos hacer para prevenirlas. Si aún así te has lesionado, nuestro consejo siempre es que te pongas en manos de un buen profesional de la fisioterapia y la osteopatía para recibir el tratamiento adecuado.