Hola, soy Diego Martín y quiero contaros lo acontecido en el Campeonato del Mundo Duatlón Avilés 2016.
El pasado viernes salía de trabajar a las 23:00 de Lugo, hace tan solo unas semanas, todo dio un giro inesperado, yo vivía en Oviedo y una oferta laboral atractiva llegaba para llevarme directo a esa gran tierra gallega.
Después de una jornada laboral intensa, mi entrenador y yo poníamos rumbo a Oviedo pensando ya en la carrera del domingo, todo un Campeonato del Mundo de Duatlón. El sábado a media mañana me vi ya recogiendo el dorsal, pegatinas para bicicleta, para el casco y la mochila que regalaban a todos los participantes como recuerdo de la prueba. Se mascaba el ambiente, la competición estaba ya cerca de iniciarse, y sobre el asfalto estaban los Junior, música épica en la zona de transición y diversos stands de diferentes marcas asociadas al deporte, entre ellas, uno de mis mayores apoyos en mi aventura por conseguir ser profesional, Grupo Adarsa.
Ya por la tarde, empezaba lo bueno.
Transiciones en el campeonato del Mundo Duatlón Avilés 2016
Llegaba la hora de entrar a la transición a dejar la bici , eso sí, previa revisión y reglaje con el Estudio de Biomecánica del que Javier Figaredo es responsable en la Clínica Nespral. También llegaban los nervios, transición enorme y poco espacio entre bicis, era importante tomar buenas referencias, me pongo a contar y verifico un problema, entre farola y farola había unos 20-25 metros, tocaría sufrir y estar muy atento para no perder la referencia.
Eso sí, en la zona de transición me empiezo a encontrar con amigos y conocidos que sólo ves en estas ocasiones, siempre es agradable y te ayuda a no pensar demasiado en la carrera, es un Campeonato del Mundo Duatlón, pensaréis que es difícil no pensar en la prueba, pero entre chistes y bromas, todo pasa a un segundo plano.
Con la bici en la zona de transición y el visto bueno de los jueces, me busco buen sitio para disfrutar de la “carrera élite” donde Emilio Martín haría un buenísimo segundo puesto teniendo en cuenta la clase y la experiencia de R.Murray. ¡Otra dimensión ver a esta gente!
Última fase de la “carrera élite” mirando el reloj, eran casi las 21:00, tenía que cenar y acostarme pronto, era hora de retirarse y descansar ahora sí pensando solo en como me sentiría en la carrera.
Cómo preparar una carrera de Duatlón
A las 5:15 de la mañana sonaba el despertador, hora de desayunar el menú de casi todos los días. Vitaminas, sales minerales y glutamina gracias a Laboratorios Nutergia y Clínica Nespral, sin duda un aporte necesario para el día a día que ayuda y mucho a conseguir los mejores objetivos. Además, leche y copos de avena, con cereales de choco para darle un poco de sabor, un plátano y un zumo de naranja, ya estaba listo y con el cuerpo lleno de energía.
Tocaba ducha, últimos preparativos y dirección a Avilés con tranquilidad, al menos un mínimo, estaba claro que participando en un Campeonato del Mundo Duatlón y con poco más de un año de experiencia, los nervios forman parte del desayuno, comida y cena, no se iban a ir ni de coña.
Nos íbamos acercando a la zona y los nervios crecían por momentos, surgían dudas de si todo estaría correcto, si la bici después de pasar la noche al aire libre estaría correcta, si en la mochila iba todo lo necesario, bueno, las dudas normales, eso si, las ganas sobresalían por encima de todo, tenía ya muchas ganas de llegar y empezar con el lío.
¡Coche aparcado, mochila al hombro, hinchador en la mano y a la transición!
Os tengo que decir una cosa, es impresionante ver y sentir el silencio incómodo de competición, ahora sí que empezaba lo bueno de verdad, ya todo cogía color. Coloco las zapatillas en la bici con gomas para una transición rápida, el bidón y el casco en el manillar, todo Ok, recibo diferentes mensajes de ánimo, entre ellos el de Alfonso y Carlos, y cuando salgo de la transición, me encuentro a unos grandes amigos que no dudé nunca que fueran a estar apoyando y animando. Llevaban camisetas personalizadas con mi nombre, increíble, esta gente sí que tiene mérito, eran las 8:00 de la mañana y allí estaban, gracias amigos, no sabéis lo que se agradece sentirse arropado ante una prueba de semejante nivel.
Calentamiento y carrera Duatlón Avilés 2016
Comienzo el calentamiento, pero ubicándome con una vista desde la zona de arriba donde está colocada la bici para coger de nuevo referencias y me voy al cajón de salida.
8:40, con un poco de retraso ya estamos todos listos, todos en la línea de salida, música épica y posteriormente un latido fuerte que nos ponía más nerviosos aún. Me sitúo en primera fila, y aparece Oscar Buján a mi lado, sabía que arrancaría rapidísimo y seguramente por debajo de 3.
A sus marcas, y salida como se esperaba, me coloco justo detrás de Oscar y paso los primeros 200m en segunda posición, alguien que venía desde atrás, da un pequeño apretón y el grupo ya se estira más dejándome a unos 25metros de la cabeza, el hueco se empieza a hacer un poco más grande pero siempre con contacto visual con la zona delantera, lo cual me daba muchos ánimos, aunque sabía que estaba rodando más rápido que nunca.
Miro el reloj y paso el 5000 en 16:35, pero aún quedaban unos 300-400 metros más. Llego a mi pasillo, cuento farolas, llego a la segunda y media, y la bici no está. Pienso que me pasé y doy media vuelta, miro los números y me doy cuenta que aún no había llegado, busco mi rueda sobre las demás y escucho voces guiándome, por fin, eran los nervios del momento. Me descalzo a la velocidad del rayo, me pongo el casco, y a recuperar esos 20″ cruciales con los que lamentablemente había perdido 20 posiciones y un segundo grupo grande en el que me debería haber montado, estas cosas pasan, de todo se aprende.
Toca apretar, somos 3.
Clemente, un mejicano y yo. Me pongo a tirar como si fuera lo último que fuera a hacer, pasamos por el puente y está mi entrenador (Jony) tomando tiempo, son 25″ los que nos sacan y me grita, “aprieta que es grupo grande y están muy cerca”. Yo quiero más, pero las piernas no me dejan, necesito un respiro, pero Clemente no puede y el mejicano no colabora.
Por detrás también aprietan, se trata de un grupo encabezado por 2 americanos, faltan 5 kilómetros y los ataques no dejan de sucederse, mantengo una buena posición y me bajo el cuarto de mi grupo, ahora sí, en la transición encuentro mi puesto, lanzo la bici a la barra, me calzo las zapatillas y a volar.
Última fase de carrera, 2.5km para remontar todo lo posible, apreté, lo di todo y se consiguió, para mí, un grandísimo resultado.
Resumen final del Campeonato del Mundo Duatlón Avilés 2016
Tuve muy buenas sensaciones a pie, sobre todo teniendo en cuenta que después de la bici donde el ritmo fue muy fuerte, he consigo llegar a meta el 13º de mi grupo de edad, con una sonrisa de satisfacción enorme sabiendo que en carrera lo había dado todo hasta el punto de haber corrido más rápido y mejor que nunca.
Es cierto, tengo un sabor agridulce por la T1 y por no poder cazar esa grieta delantera. Me llevo una experiencia enorme con la que seguro que creceré como deportista, es la hora de los agradecimiento, no me quiero olvidar de nadie, todos los que me apoyaron en la carrera, además de amigos y familiares, también empresas colaboradoras como Grupo Adarsa (Mercedes Benz), Clínica Nespral, Hotel Carreño y COBEX.
Muchas gracias al resto por leerme, os seguiré contando mis andaduras y cosas curiosas que me pasen.
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¡Nos vemos pronto!
